• Diagnóstico de las hernias de disco lumbares.

    La Resonancia Magnética es el procedimiento de elección, por su elevada sensibilidad para demostrar la causa de la afectación radicular. No deben usarse las radiografías simples en la patología discal por lo escaso que aportan. La RM permite la mejor visualización de las relaciones anatómicas entre las raíces nerviosas y los tejidos que las rodean. En las personas jóvenes la lumbociática suele estar causada por un disco herniado, mientras que en los pacientes de mayor edad la compresión radicular está más habitualmente asociada a una combinación de presencia de osteofitos, hipertrofia de carillas articulares, hipertrofia-calcificación de los ligamentos, espondilólisis y espondilolistesis que comprometen el espacio en el canal raquídeo, recesos laterales o agujeros de conjunción.
    En general existe una sobreutilización de las pruebas de neuroimagen en este tipo de patología. La mayoría de los pacientes pueden y deben recibir tratamiento inicialmente basado en la historia y la exploración clínica, sin que sea necesario obtener una resonancia en todos. Las indicaciones claras incluyen: déficit motor focal, presentación clínica atípica, no existencia de mejoría clínica con el tiempo y planificación quirúrgica.
    En los pacientes con marcapasos o válvulas cardiacas metálicas que no puedan someterse a RM, el TAC identifica la degeneración discal y las alteraciones facetarias, el resto de las estructuras se definen peor, su resolución es mucho menor que la de la RM.
    La mielo-TAC también ayuda a definir las relaciones anatómicas entre raíces y disco herniado o cambios espondiloartrósicos.
    La electromiografía ayuda a la localización de la raíz mostrando signos de denervación en una distribución miotómica específica. Su sensibilidad es escasa, se necesita una interrupción axonal de la raíz motora para que sea patológico. Su principal utilidad estriba en distinguir la radiculopatía de otros procesos neuropáticos periféricos, que como la neuropatía del ciático poplíteo externo en la cabeza del peroné puede ser indistinguible de la radiculopatía L5.