• Semiología de la lesión del nervio mediano a nivel del codo

    El nervio mediano puede lesionarse a nivel del codo por fracturas, luxaciones y traumas directos. El ligamento de Struthers o las cabezas del pronador redondo son sitios de atrapamiento. Es una zona también sensible a problemas por venopunciones. La clínica es superponible a la de la lesión en el brazo proximal o axila pero puede suceder que se compriman de forma preferente determinados fascículos del nervio que, dado que no llevan sus fibras uniformemente distribuidas, se puede manifestar la lesión clínicamente como la de la lesión del nervio interóseo anterior. (Brazis et al; 2007) (Gross et al; 1999)


    LESIÓN EN EL LIGAMENTO DE STRUTHERS
    La apófisis supraepitroclear del húmero es una anomalía congénita localizada a unos 6 cm del punto más saliente de la epitróclea, en la cara la cara anterointerna del húmero, con frecuencia bilateral, que afecta al 1-3% de la población. Se trata de un resto filogenético de la hendidura supraepitroclear de algunos mamíferos. Mide de 6 a 18 mm de longitud, con un vértice que se dirige oblicuamente hacia abajo, delante y adentro. Puede ser fibrocartilaginosa u ósea, unida al borde de la epitróclea por el ligamento de Struthers (Miralles et al; 2007) (Mumenthaler et al; 1974). El nervio mediano pasa por debajo de esa epitróclea, y está cubierto por el ligamento de Struthers, pudiéndo ser comprimido a dicho nivel. La arteria braquial también puede sufrir compresión (Brazis et al; 2007)


    La clínica es similar a la encontrada en las lesiones proximales. A veces se puede en personas delgadas palpar el espolón óseo. Puede haber dolor en cara anterior del codo que empeora en la extensión del antebrazo. (Brazis et al; 2007) (Gross et al; 1999)


    SÍNDROME DEL PRONADOR REDONDO
    La lesión del nervio mediano en el síndrome del pronador redondo se produce a su paso entre las dos cabezas del pronador redondo y del arco tendinoso del flexor superfical común de los dedos. Se produce por los movimientos repetidos de pronación. Se afecta la función sensitiva y motora distal, pero a veces puede conservarse la función del pronador redondo por salir la rama que lo inerva antes de la región de compresión. En la región proximal del antebrazo puede haber dolor, que aumenta a la flexión de la muñeca y a la resistencia a la pronación. Podemos encontrar la presencia del signo de Tinel, y reproducción de los síntomas al presionar sostenidamente el músculo. (Brazis et al; 2007), (Gross et al; 1999) (Obach Tuca; 1994)


     


    BIBLIOGRAFÍA: 


    Brazis P, Biller J, Masdeu J (Eds) (2007). Peripheral Nerves. En: Localization in Clinical Neurology, (pp 27-72). Philadelphia: Lippincott Williams & Wilkins.
    Gross PT, Tolomeo EA (1999). Proximal median neuropathies. Neurol Clin, 17, (3) 425-445.


    Miralles RC, Rull M, Miralles I (2007). Síndromes estenosantes de origen osteoligamentoso. En : Miralles RC, Miralles I (Eds), Biomecánica clínica de las patologías del aparato locomotor, (pp 193-204). Barcelona : Masson.


    Mumenthaler M, Schliack H (Eds) (1974). Nervio mediano. En: Patología de los nervios periféricos. Diagnóstico y tratamiento, (pp 270-286). Barcelona: Ediciones Toray.


    Obach Tuca J (1994). Enfermedades del las raíces, plexos y nervios periféricos. En: Codina-Puiggros A (Ed), Tratado de Neurología, (pp 777-812). Madrid: Editorial Libro del Año.