• Semiología de las lesiones del plexo braquial

    LESIÓN GLOBAL DE PLEXO BRAQUIAL
    La lesión total de plexo braquial es infrecuente, y casi siempre debido a traumatismos severos. Se afectan todas las raíces desde C5 a D1. (Chad; 2006) (Brazis; 2007) (Mumenthaler; 2004).
    Clínicamente se traduce por parálisis completa de toda la musculatura del miembro superior, e incluso de cintura escapular si la lesión es preganglionar, con afectación de músculos serrato y romboides, con un miembro superior pendular, con pérdida de sensibilidad desde hombro y reflejos abolidos (Moghekar et al; 2007) (Patten; 1995) (Wynn; 1998).

     

    LESIÓN PARCIAL DEL PLEXO BRAQUIAL
    Lesión del tronco superior del plexo braquial (tipo Erb-Duchenne)
    Dentro de las parálisis incompletas, mucho más frecuentes (Wynn; 1998), la superior por afectación de la raíces C5-C6, depara una parálisis de músculo deltoides, supra e infraespinoso, braquial anterior, bíceps, coracobraquial y supinador largo, que se traduce clínicamente por la imposibilidad para la abducción y rotación externa del brazo, flexión del codo, y supinación del antebrazo (Chad; 2006). La postura resultante es la característica “del pedigüeño” con el brazo en adducción y en rotación interna, el antebrazo extendido y pronado, y la palma de la mano puede ser vista desde atrás (Moghekar et al; 2007). El déficit sensitivo queda restringido a la cara externa del brazo, antebrazo, pulgar y segundo dedo. Hay arreflexia bicipital y estilorradial (Brazis; 2007) (Mumenthaler; 2004).

    Lesiones del tronco medio del plexo braquial.
    Se debe a una lesión de la rama anterior de la raíz C7 o tronco medio. Su lesión aislada es excepcional, y casi siempre debidas a heridas penetrantes (Chad; 2006). Se produce una parálisis de la extensión del antebrazo, carpo y dedos (Moghekar et al; 2007), clínica muy parecida a la neuropatía de nervio radial, salvo por respetar al músculo supinador largo que recibe inervación de C5 y C6 (Wynn; 1998). El déficit sensitivo se limita al dorso del antebrazo, y zona radial del dorso de la mano. El reflejo tricipital está abolido (Brazis; 2007) (Mumenthaler; 2004) (Patten; 1995).

    Lesiones del tronco inferior del plexo braquial (tipo Dejerine-Klumpke)
    La parálisis inferior por lesión de las raíces C8-D1, depara una parálisis de la musculatura flexora de la mano y dedos: músculo cubital anterior y flexores de los dedos, y musculatura intrínseca de la mano (músculos tenares, hipotenares e interóseos), que se traduce por imposibilidad para movilizar la mano (Wynn; 1998). En estadios crónicos, puede desarrollarse una mano en garra, con hiperextensión de articulaciones metacarpofalángicas (al estar respetados los músculos extensores largos de la mano), y flexión de interfalángicas. Existe anestesia en el borde interno de la mano y antebrazo. El reflejo flexor de los dedos está abolido (Chad; 2006) (Patten; 1995). Si se afecta la raíz D1 a nivel proximal a la salida de las fibras simpáticas preganglionares puede asociarse un síndrome de Claude Bernard Horner (ptosis, miosis y anhidrosis) (Kahle; 2008) (Moghekar et al; 2007).
    La lesión del tronco inferior es menos frecuente que la del superior, pero más que la del medio (Brazis; 2007) (Mumenthaler; 2004).

    Lesión de la cuerda lateral
    Si la lesión del plexo braquial es a nivel de la cuerda lateral, la parálisis afectará a los músculos inervados por el nervio musculocutáneo: bíceps, braquial y coracobraquial, y por la rama radial del nervio mediano: músculos pronadores, flexores del carpo y de los dedos (flexor superficial de los dedos y flexor profundo del 1º y 2º dedos) (Chad; 2006) (Brazis; 2007) (Patten; 1995). El déficit sensitivo se limita al borde lateral del antebrazo, territorio del nervio musculocutáneo. El reflejo bicipital está disminuido o ausente (Moghekar et al; 2007) (Mumenthaler; 2004) (Wynn; 1998).

    Lesión de la cuerda medial
    Si la lesión es a nivel de la cuerda media, se produce una paresia en la musculatura dependiente de nervio cubital: flexor cubital del carpo, flexor profundos del 3º y 4º dedos, y musculatura intrínseca de la mano y rama medial de nervio mediano: abductor corto del pulgar, oponente, flexor superficial del 1er dedo, y los dos primeros lumbricales (Chad; 2006) (Brazis; 2007) (Patten; 1995). Existe anestesia en el borde interno de la mano y antebrazo (Wynn; 1998). El reflejo flexor de los dedos está abolido (Moghekar et al; 2007) (Mumenthaler; 2004).

    Lesión de la cuerda posterior
    Si la lesión es a nivel de la cuerda posterior provoca parálisis a nivel del nervio subescapular con afectación de la rotación interna del brazo, el nervio toracodorsal con paresia del músculo dorsal ancho (adducción y rotación interna del brazo, y el nervio axilar (abductor del brazo) (Chad; 2006) (Brazis; 2007) (Patten; 1995). Se objetiva déficit sensitivo en la cara lateral del brazo (Moghekar et al; 2007) (Mumenthaler; 2004) (Wynn; 1998).

     

    BIBLIOGRAFÍA:
    -Brazis PW; Masdeu JC; Biller J (Eds) (2007). Cervical, Brachial, and Lumbosacral Plexi. En: Localization in Clinical Neurology, (pp 73-89). Philadelphia: Lippincott Williams & Wilkins.

    -Chad D (2006) Enfermedades de las raíces y plexos nerviosos. En: Bradley PW (Ed), En: Neurología clínica, (pp 2247-2275). Madrid: Elsevier.

    -Moghekar AR, Moghekar AR, Karli N, Chaudhry V (2007). Brachial plexopathies: etiology, frequency, and electrodiagnostic localization. J Clin Neuromuscul Dis. 9(1):243-247.

    -Mumenthaler M, Mattle H (Eds) (2004). Lesions of Individual Peripheral Nerves. En: Neurología, (pp 741-795). Stuttgart: Thieme.

    -Patten J (Ed) (1995). Diagnosis of Cervical Root and Peripheral nerve lesions Affecting the Arm. En: Neurological differential diagnosis, (pp 282-299). Argentina: Springer.

    -Wynn Parry CB (1998). Braquial Plexus injuries. En: Matthews (Ed), Neuropathies, (pp 143-157). Londres: Elsevier.