• Alucinosis auditivas y alucinaciones auditivas

        Las alucinosis son percepciones auditivas en las que el sujeto carece de un juicio de realidad positivo, y por consiguiente son criticadas adecuadamente en el momento de producirse. Pueden existir asimismo otros tipos de alucinosis como las visuales, olfatorias o las táctiles.

        Pueden producirse en el contexto de enfermedades diversas como las intoxicaciones agudas, consumo o deprivación de fármacos o sustancias de abuso, esquizofrenia, etc. Es muy característica la alucinosis alcohólica.

        Una alucinación es una percepción que no corresponde a ningún estímulo físico externo. Sin embargo, la persona siente esa percepción como real. Por ello la alucinación es considerada una pseudo-percepción dada la ausencia de un estímulo externo. En ese sentido es distinta de la ilusión, que es una percepción distorsionada de un estímulo externo efectivamente existente. Las alucinaciones pueden ocurrir en cualquier modalidad sensorial, visual, auditiva, olfativa, gustativa, táctil, proprioceptiva, equilibrioceptiva, nociceptiva, termoceptiva o varias mezcladas.

        Las alucinaciones acústicas o auditivas (en particular las que incorporan una o más voces que se refieren al sujeto que las experimenta) están muy asociadas con la esquizofrenia y son más frecuentes en sujetos psicóticos. Adquieren normalmente dos formas: verbales y no verbales. Ambas pueden darse en un mismo individuo y suelen presentar un tono amenazante o imperativo. Su contenido puede influir directamente en el comportamiento del paciente y provocar conductas bizarras, disruptivas o suicidas. La mayoría provocan malestar y angustia, aunque algunas veces resultan tranquilizadoras y no molestan al paciente.

        Un tipo especial de alucinación auditiva es la alucinación musical. Son muy infrecuentes y se desconoce su función diagnóstica. Las causas más frecuentes de aparición suelen ser la sordera y las lesiones cerebrales. Predominan en el sexo femenino. Dependiendo de su etiología, la alucinación puede variar en algunos aspectos como su forma de comienzo, aguda o insidiosa, la familiaridad de lo escuchado, el género musical, la vivencia de lo percibido… Son propias de los trastornos psiquiátricos que se relacionan normalmente con depresión y pueden acompañarse de otros tipos de alucinación.